Pues acabo de probar quitarle el teclado a este "convertible" (un ThinkPad X12), y Gnome activa automáticamente la rotación de pantalla y un teclado virtual cuando se puede introducir texto.
Vale, es algo básico, pero llevo una tarde bastante satisfecho comprobando que el diferencial de felicidad que me da usar Linux en el portátil del trabajo es mayor de lo que esperaba.